Blanca de los Ríos Nostench de Lampérez
Investigadora, escritora y directora de una revista (Raza Española), Blanca de los Ríos Nostench nació en Sevilla el 15 de agosto de 1959. Vivió una vida acomodada en la que tanto su padre, Demetrio de los Ríos y Serrano como su madre, María Teresa Nostench, la educaron en un ambiente rodeado de arte y literatura.
Su producción literaria se centró sobre todo en cuentos y relatos cortos publicados en revistas, como la mayoría de autores del periodo, aunque también escribió algunas novelas cortas, entre ellas la que fuera su primer libro,Margarita(1878) publicada justo un año después del fallecimiento de su madre, acontecimiento que la marcaría profundamente, tal como puede observarse en algunos de sus textos. Los cuentos y novelas que escribió entre 1898 y 1907 los recopiló ella misma en cuatro volúmenes titulados La Rondeña, cuentos andaluces. El salvador, cuentos varios (1902), La niña de Sanabria. Melita Palma y Sangre Española (1907), Madrid Goyesco (1912) y El tesoro de Sorbas (1914). Fue una mujer culta concienciada con la crisis de fin de siglo y los problemas de España para incorporarse a la modernidad, temas que abordó tanto en sus cuentos como en sus artículos periodísticos.
A pesar de ser alagada como poeta, la gran vocación de Blanca de los Ríos fue la investigación literaria. En 1885, la Real Academia reconoció el trabajo que realizó en torno a la biografía de Tirso de Molina, en 1924 se le concedió la Gran Cruz de Alfonso XII y en 1948 la de Alfonso X el Sabio. A pesar de que su labor fue alabada por importantes instituciones, se le negó un sillón en la Real Academia, seguramente debido a su condición de mujer, como le sucedió a Emilia Pardo Bazán, gran amiga de Blanca.
A pesar de su débil salud, vivió 96 largos años, dando su último aliento el 15 de abril de 1956 en Madrid y siendo, hasta la fecha, la única mujer enterrada en el Panteón de Hombres Ilustres del cementerio de San Justo.